Las parroquias Elías Sánchez Rubio y La Guajira las más perjudicadas.
El alcalde del municipio Guajira, Hébert Chacón, declaró anoche la alerta roja en la localidad, debido a la persistente crecida de los ríos Paraguachón y Limón. “El agua sube y baja brúscamente, por eso estamos declarando el alerta”, dijo el alcalde. Más de 700 familias de las parroquias Elias Sánchez Rubio y la Guajira, del municipio fronterizo están siendo perjudicadas por la crecida de los ríos y los caños Bolombolo, Majayuri y Carretal. La situación es más crítica para los indígenas de los sectores Barrio Nuevo, con 45 familias; Luis Emiro Palmar, 105; Miralejos 2, con 80; Puerto Aleramo, 155; Taparito, 15; Juamana, 25; Potreritos, 25; San Rafael de Paraguachón, 45 familias, para un total de 495, informó Helmiro Polanco, secretario de Enlace Comunitario en la Guajira. Polanco resaltó que estas personas aún se encuentran en sus casas y se han negado a trasladarse hasta los refugios que habilitaron por la situación, que aunque no se ha decretado la emergencia, miles de persona están sin comida, agua potable, medicamentos y ni un techo para dormir. Robertina González, de 85 años, es una de las wayuu que vive en el sector Barrio Nuevo y se niega a salir de su humilde rancho, a punto de caer por la fuerza del agua. “Es mi casa durante los últimos 50 años y no la voy abandonar. Esperaré a que el agua se vaya”, dijo la mujer agarrada de su bastón. Mientras que Protección Civil reportó unas 118 familias afectadas. Éstas fueron llevadas a seis refugios: Centro Cívico Guarero, con 16 familias; colegio Babino, 36; escuela Varilla Blanca, 14; unidad educativa Marcial Lozano, 11; en Llamara, 14; y en la planta procesadora de sábila 27 familias más, detalló Herman Bracho, director regional del organismo. La dirección regional de Salud también realizó, ayer, una jornada médica en los sectores inundados y llevó pañales y medicamentos. De acuerdo con el alcalde Hébert Chacón, a 800 viviendas se les metió el agua, pero sólo 178 familias acudieron a los refugios. Chacón dijo que se habilitaron 11 refugios en las dos parroquias, las más desguarnecidas por la crecida de los mencionados ríos. Las intensas precipitaciones que han acaecido en el vecino país han causado su desbordamiento y, por consiguiente, han inundado a los wayuu. Ayer, la 13 Brigada de Infantería, de la Fuerza Armada Nacional, activó el operativo Dignidad Guajira 2011, a cargo del general de brigada Pedro Pérez Rabelo. También realizaron un sobrevuelo y visitaron otras dos comunidades afectadas: Berlín, donde hay 45 familias perjudicadas y La Esperanza, con 46. De grave calificó María Luisa Lundvik, directora de Benposta en la Guajira. Sobretodo en la comunidad de Los Filúos, donde varias familias se encuentran con sus casas inundadas y los comedores de cuidado infantil llevan nueve meses cerrados.
El alcalde del municipio Guajira, Hébert Chacón, declaró anoche la alerta roja en la localidad, debido a la persistente crecida de los ríos Paraguachón y Limón. “El agua sube y baja brúscamente, por eso estamos declarando el alerta”, dijo el alcalde. Más de 700 familias de las parroquias Elias Sánchez Rubio y la Guajira, del municipio fronterizo están siendo perjudicadas por la crecida de los ríos y los caños Bolombolo, Majayuri y Carretal. La situación es más crítica para los indígenas de los sectores Barrio Nuevo, con 45 familias; Luis Emiro Palmar, 105; Miralejos 2, con 80; Puerto Aleramo, 155; Taparito, 15; Juamana, 25; Potreritos, 25; San Rafael de Paraguachón, 45 familias, para un total de 495, informó Helmiro Polanco, secretario de Enlace Comunitario en la Guajira. Polanco resaltó que estas personas aún se encuentran en sus casas y se han negado a trasladarse hasta los refugios que habilitaron por la situación, que aunque no se ha decretado la emergencia, miles de persona están sin comida, agua potable, medicamentos y ni un techo para dormir. Robertina González, de 85 años, es una de las wayuu que vive en el sector Barrio Nuevo y se niega a salir de su humilde rancho, a punto de caer por la fuerza del agua. “Es mi casa durante los últimos 50 años y no la voy abandonar. Esperaré a que el agua se vaya”, dijo la mujer agarrada de su bastón. Mientras que Protección Civil reportó unas 118 familias afectadas. Éstas fueron llevadas a seis refugios: Centro Cívico Guarero, con 16 familias; colegio Babino, 36; escuela Varilla Blanca, 14; unidad educativa Marcial Lozano, 11; en Llamara, 14; y en la planta procesadora de sábila 27 familias más, detalló Herman Bracho, director regional del organismo. La dirección regional de Salud también realizó, ayer, una jornada médica en los sectores inundados y llevó pañales y medicamentos. De acuerdo con el alcalde Hébert Chacón, a 800 viviendas se les metió el agua, pero sólo 178 familias acudieron a los refugios. Chacón dijo que se habilitaron 11 refugios en las dos parroquias, las más desguarnecidas por la crecida de los mencionados ríos. Las intensas precipitaciones que han acaecido en el vecino país han causado su desbordamiento y, por consiguiente, han inundado a los wayuu. Ayer, la 13 Brigada de Infantería, de la Fuerza Armada Nacional, activó el operativo Dignidad Guajira 2011, a cargo del general de brigada Pedro Pérez Rabelo. También realizaron un sobrevuelo y visitaron otras dos comunidades afectadas: Berlín, donde hay 45 familias perjudicadas y La Esperanza, con 46. De grave calificó María Luisa Lundvik, directora de Benposta en la Guajira. Sobretodo en la comunidad de Los Filúos, donde varias familias se encuentran con sus casas inundadas y los comedores de cuidado infantil llevan nueve meses cerrados.
Florian, Y. (2011, Noviembre 29) Declaran alerta roja en la Guajira por lluvias. Panorama. Disponible en: http://www.panorama.com.ve/micros/ciudadanos_site/804274.html
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